1 ORIGEN DE LOS DICHOS
Los dichos, de uso corriente vienen de una historia, de una anécdota, de un cuento, de un personaje real o ficticio. Todos tienen su porque, un motivo por el que se dicen. El origen es muy diverso.
A BUEN ENTENDEDOR, POCAS PALABRAS
Cuéntase que un día un mendigo pidió ver al cardenal Mazarino, primer ministro de Luis XVI, para hacer le saber la penuria que padecía. Después de dudarlo bastante, el cardenal aceptó recibirle, pero con una condición: el pobre hombre tenía que expresar sus deseos en dos palabras. Este, obediente, entró en el despacho y dijo: "Hambre, frío...". Mazarino, volviéndose a su secretario, contestó: "Comida, ropas...". La entrevista había terminado, pero dejó un buen ejemplo: "A buen entendedor, pocas palabras".
Foto: Corbis
2 Hoy finalizamos nuestra visita a La meseta de Ennedi, la arena inunda la meseta, rodeando las formaciones verticales de piedra arenisca que reciben el nombre de torres por su forma. ((Tchad Ennedi 2.pps))
3 El siglo XXI está llamado a ser el siglo de los nuevos materiales. Uno de los últimos es el QUITOSANO, también llamado chitosán, es una biomolécula extraída de las ‘cáscaras´de crustáceos marinos, tales como langostas, cangrejos y gambas, así como en otros con exoesqueleto o caparazón. El chitosán se utiliza en la industria alimentaria, agrícola, medioambiental y medicinal y su nombre proviene del griego y significa "coraza". Al ser totalmente natural, es biodegradable y carente de efectos secundarios, lo que convierte al chitosán en un producto con muchas utilidades en el mundo de la cosmética, la medicina y la nutrición. Se puede usar en agricultura como fungicida y en la industria vitivinícola para evitar el deterioro del vino. En medicina se usa a veces como añadido en vendajes para reducir el sangrado y disminuir la cantidad de infecciones. Los últimos avances lo sitúan como el sustituto del plástico.
4 La frase de esta semana es de Jaime Luciano Balmes, filosofo español (1810-1848):
“El trabajo es un título natural para la propiedad del fruto del mismo, y la legislación que no respete ese principio es intrínsecamente injusta.”